La Habana, 29 sep.- El canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, calificó de “castigo adicional” la retención en los Estados Unidos del cubano René González, quien cumplirá en ese país el próximo mes de octubre una condena de 13 años de privación de libertad sin el permiso de las autoridades para recibir visitas de su familia radicada en la isla caribeña.

También constituye “una venganza de naturaleza política» el régimen de “libertad supervisada” durante tres años más sin regresar a su país, apuntó Rodríguez en declaraciones a la prensa de Brasil, donde realiza una visita diplomática. Su liberación por parte del gobierno de los Estados Unidos sería un gesto humanitario muy apreciado por sus familiares y el pueblo cubano, dijo.

Asimismo, aseguró que la decisión de las autoridades estadounidenses de trasladar a González al departamento de La Florida pone en peligro su seguridad personal por la presencia en ese lugar de grupos terroristas entre la comunidad exiliada cubana.

González es uno de los cinco cubanos juzgados durante el 2001 en Miami por espionaje y declarados por Cuba Héroes de la República, uno de los conflictos políticos actuales entre ambas naciones que rompieron relaciones diplomáticas desde 1961 y viven un diferendo de más de medio siglo.

El 28 de septiembre, el diario Granma, órgano oficial del Partido Comunista de Cuba, afirmó que “la única acción mínimamente decorosa del gobierno de los Estados Unidos, a estas alturas, sería la de permitir el inmediato regreso de René a Cuba” y poner fin a “las sentencias vengativas” contra Ramón Labañino, Antonio Guerrero, Fernando González y Gerardo Hernández, que aún cumplen sentencia.

En su editorial titulado “Nueva injusticia de los Estados Unidos contra los Cinco Héroes”, el rotativo se opuso a la decisión de la jueza Joan A. Lenard, del Distrito Sur de la Florida, de denegar la moción presentada por González para regresar a Cuba tras terminar su retención carcelaria.

Lenard alegó que la moción de René es prematura porque el período de libertad supervisada no comienza hasta tanto el individuo salga de prisión y se necesita que pase cierto tiempo antes que la Corte sea capaz de evaluar de forma apropiada las características del acusado.

La sentencia impuesta al cubano en 2001 incluyó el requisito especial de prohibirle tras su salida de la cárcel “asociarse a/o visitar lugares específicos donde se sabe que están o frecuentan individuos o grupos tales como terroristas”, según el documento penal.

A su vez, Granma aseguró que la lucha por la excarcelación de los cinco cubanos “es la causa irrenunciable de la nación cubana” y agradeció las personas, agrupaciones, jefes de Estado o de Gobierno, altos funcionarios gubernamentales y personalidades, que han pedido la libertad de los cinco cubanos.

Cuba considera injustas las severas condenas impuestas en Estados Unidos a estos hombres y desde 2001 encauza una campaña nacional e internacional por su libertad y regreso a la isla. (2011)