La Habana, 16 ago.- Nacionales y visitantes internacionales disfrutarán de una de las expresiones más auténticas de la música popular de Cuba: la rumba, un coctel festivo de músicas y danzas africanas.

El X Festival Internacional La Ruta de la Rumba, declarada en 2016 Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Organización de Naciones Unidas para la Ciencia y la Cultura, se realizará del 17 al 31 de agosto en nueve de las 15 provincias de la isla caribeña.

Músicos y agrupaciones calientan los tambores y afinan desde la semana pasada sus instrumentos, a la vez que ensayan coreografías para brindar el mayor colorido a las presentaciones de este género cantable y bailable de origen afro-español.

Listos para «rumbear»

De acuerdo con sus organizadores, La Ruta de la Rumba 2018 se desarrollará en barrios y comunidades de las provincias de La Habana, Pinar del Rio, Matanzas, Cienfuegos, Santi Spíritus, Ciego de Ávila, Camagüey, Guantánamo y Santiago de Cuba.

Según especialistas, la rumba hoy es el más característico de los ritmos cubanos y sigue atrayendo a visitantes de otras latitudes por la repercusión que ha tenido con las giras internacionales de agrupaciones folclóricas.

Cine de rumberas Los rumberos de Cuba hicieron un gran aporte al desarrollo de la cinematografía de México con el llamado cine de rumberas, un género que floreció en la llamada Época de Oro del Cine Mexicano en los años 40 y 50 del siglo XX. Sus estrellas principales fueron las llamadas «rumberas», bailarinas de ritmos musicales afroantillanos. Las cinco figuras estelares que filmaron decenas de películas fueron: María Antonieta Pons (1922-2004), Meche Barba (1922-2000), Ninón Sevilla (1929-2015), Amalia Aguilar (n. 1924) y Rosa Carmina (n. 1929). Solo una, Meche Barba, era mexicana. Las rumberas primero llegaron a México a través del teatro y lo hicieron desde el siglo XIX, cuando llegaron acompañando a muchos cómicos y bufos de origen cubano que se establecieron en la Ciudad de México, en la época de las carpas y los teatros de revista. El término «rumbera» proviene del baile cubano conocido como la rumba, un ritmo musical que se puso de moda en América Latina desde finales del siglo XIX hasta los años 40 del siglo XX. En el cine de rumberas, las principales heroínas son mujeres, generalmente humildes e ingenuas que, debido a una mala jugada del destino, se ven obligadas a caer en el mundo de la prostitución y a involucrarse con gánsteres, mafiosos y proxenetas.

Gladys Collazo, presidenta del Consejo Nacional de Patrimonio Cultural, sostiene que la rumba cubana es una expresión viva en la cual armonizan tradición y contemporaneidad.

El festival se inaugurará en la plaza de Belén, en La Habana Vieja, con una escenificación teatral del grupo Rita Montaner, cantantes del punto campesino cubano y agrupaciones rumberas.

Tiene como invitado de honor al intelectual cubano Miguel Barnet, presidente de la no gubernamental Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac), quien en varias ocasiones ha dicho que la rumba es tradición, pero también modernidad.

Programa

Conciertos, coloquios, talleres de baile y clases magistrales impartidas por investigadores del género forman parte del programa oficial. Entre los disertantes figura el primer bailarín, coreógrafo y Premio Nacional de Danza, Isidro Rolando.

El festival es auspiciado por el Ministerio de Cultura de Cuba, la Fundación Fernando Ortiz, la Uneac, el Consejo Nacional de Patrimonio, la Asociación Hermanos Saíz, y el proyecto Timbalaye.

Durante el festival habrá reconocimientos a diferentes personalidades que han tenido que ver con el género, además de lecciones de danza, rumba y son, un encuentro con íconos de la rumba y sesiones teóricas.

También recibirán homenajes Los Muñequitos de Matanzas y la Agrupación Folclórica Los reyes del tambor, por sus aniversarios 65 y 30, respectivamente; así como encuentros de técnicas de percusión.

La cita será clausurada el sábado primero de septiembre en el centro cultural El Sauce, en el municipio habanero de Playa.

Origen

La Rumba, un género musical y bailable de origen afro-español, surge en Cuba a finales del siglo XIX y se desarrolla tras la abolición de la esclavitud.

Su génesis se remonta a las cuarterías y solares (casas de vecindad) con población mayoritariamente negra humilde, y alrededor de los ingenios (fábricas) azucareros, durante la expansión de esta industria.

Las plantaciones de caña de azúcar en La Habana y Matanzas fueron los centros principales de su evolución.

La rumba, que también se bailaba en las tabernas, bares y similares desde el siglo XVII, se hizo popular en las primeras décadas del siglo XX.

Entre los más conocidos grupos de rumba en el pasado se cuentan Lolo Yonkori dirigido por Alberto Sayas; Celeste Mendoza y su grupo de guaguancó; Clave y guaguancó, dirigido por Dedeo; Grupo de guaguancó, cantando Carlos Embale, Los Papines y Los Muñequitos de Matanzas. (2018)