La Habana, 3 jun.- Sobre soluciones para los problemas energéticos locales, resiliencia ante el cambio climático y alianzas para aumentar el impacto de la formación comunitaria en fuentes renovables de energía intercambian miembros de Cubasolar y participantes en un encuentro en esta capital.

Realizado del 1 al 3 de este mes, en la Casa Museo Oswaldo Guayasamín, el Ciclo de conferencias “Promoción y uso de fuentes renovables de energía” reúne a especialistas de la Oficina del Historiador de la Ciudad, la Quinta de los Molinos –primer Centro demostrativo de energías renovables en la isla– y el Laboratorio de Energía Fotovoltaica de la Facultad de Física de la Universidad de La Habana.

Durante la apertura de las jornadas de capacitación, Leonardo Pascual, director de la Quinta de Los Molinos, se refirió al nuevo modelo energético de ese espacio habanero, su impacto, beneficios y posibilidades de extensión de la experiencia en el Centro Histórico de la capital cubana.

El denominado modelo energético sostenible y de cultura verde es financiado por la Agencia Extremeña de Cooperación (aexcid). Tiene como propósito generar el 100 por ciento de la energía eléctrica demandada por la Quinta, a partir de fuentes renovables.

Asimismo, incluye actividades medioambientales, educativas y de formación para estudiantes, personas formadoras, profesionales y población en general, haciendo énfasis en los grupos vulnerables.

Durante la primera jornada de conferencias, Luis Bérriz, presidente de Cubasolar, se refirió al empleo de las redes energéticas locales. Sobre ese tema también disertó el experto durante un taller en la central provincia de Villa Clara, a fines de mayo, en el cual insistió en que la electricidad solar forma parte del desarrollo social sostenible.

De acuerdo con Bérriz, para Cuba pudiera resultar más barato producir electricidad a partir de las fuentes renovables de energías que de los combustibles fósiles, dado que la radiación solar es 1800 veces mayor que el petróleo empleado en el país, mientras en un solo metro cuadrado se reciben 150 kilowatt/hora cada mes.

Asimismo, reiteró la necesidad de que los municipios recurran, de manera preferencial, a la utilización de residuales de origen animal y vegetal para producir electricidad o calor dirigido a múltiples usos, con vistas a evitar focos de contaminación ambiental y obtener biofertilizantes que no afecten la atmósfera.

A proyectos de bajo consumo energético en espacios urbanos y estrategias sustentables en edificaciones de La Habana estuvo dedicado el segundo día del ciclo de conferencias de Cubasolar. Este viernes 3 de junio, las ponencias tratarán sobre el uso de la energía eólica, el biogás y otras fuentes renovables en el desarrollo local.

Exploración de la energía solar en La Habana

En tanto, el 31 de mayo tuvo lugar el taller “Mapa Solar de Guanabacoa”, en La Habana, donde especialistas del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (Ciemat), de España, compartieron metodologías y enfoques de trabajo para la elaboración de mapas del potencial energético de las azoteas, así como los resultados que obtienen de este tipo de estudio aplicado al área urbana del municipio habanero.

Un reporte de Cubasolar indicó que por la parte cubana participaron profesionales, académicos e investigadores de varias instituciones, para conocer cómo adecuar estas metodologías al entorno tecnológico disponible en la isla. El objetivo es elaborar mapas de este tipo para avanzar en la prospección solar en entornos urbanos, añadió la fuente.

Este encuentro forma parte de las acciones del proyecto La Habana Ciudad Solar, que financia la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (Aecid) y coordinan Sodepaz (Solidaridad para el desarrollo y la paz) y Cubasolar.

Datos sobre las FRE en el país

Ángel Rubio, de la Universidad Central Marta Abreu de Las Villas, expuso en el taller efectuado en Villa Clara las experiencias en la explotación de las bioelétricas en Cuba, a partir de la sostenibilidad, la eficiencia y el incremento del empleo de las fuentes renovables de energía (FRE).

Informó que cinco programas nacionales se destinan al aumento de la generación eléctrica mediante biomasa, el impulso al empleo de fuentes renovables de energía, el logro deseado de la eficiencia energética, el desarrollo energético mediante el uso de biogás y la formación de recursos humanos.

En tal sentido, apuntó la necesidad de revitalizar el desarrollo energético empleando el biogás, con la intervención fundamental del Ministerio de la Agricultura y de otros sectores.

Apuntó que Cuba tiene 17 bioeléctricas propuestas –plantas energéticas de los ingenios que permite integrar la producción de azúcar y la generación de electricidad–, aunque solo una está en fase de puesta en marcha y tres se encuentran sujetas a un proceso inversionista. (2022)