La Habana, 11 mar.- La decisión de Panamá de exigir visado de tránsito a nacionales de Cuba que viajan a terceros países con escala en el istmo generó dos días de protesta de cientos de personas frente a la embajada de esa nación en La Habana, que dice estar en contacto con la sede diplomática para atender los intereses de sus ciudadanos.

“Es una decisión de ese país, que supongo tendrá sus razones, pero eso pone nuevamente a las personas de rehenes de las políticas, eleva sus gastos y trastorna planes personales y familiares”, dijo Sergio P., de 47 años, ingeniero industrial.

Su viaje estaba previsto para tres días después que entre en vigor la medida, el 12 de marzo, por lo que tendrá que cambiar su boleto, pagando la diferencia o penalización, además de la visa para permanecer en el aeropuerto unas horas en su itinerario al sur.

La cancillería se mantiene en contacto con la embajada panameña en Cuba, con el propósito de que sean atendidos los ciudadanos de la nación caribeña que viajan a terceros países a través de Panamá, señaló en una declaración Ernesto Soberón, director general de Asuntos Consulares y Atención a Cubanos Residentes en el Exterior del Ministerio de Relaciones Exteriores.

Donde dije digo…

Aunque el 21 de febrero pasado, el Servicio Nacional de Migración de Panamá posteó en su cuenta en Twitter que la visa para pasajeros cubanos “no se aplicará por el momento”, ahora retoma la medida con aplicación inmediata.

De acuerdo con el Decreto Ejecutivo No.19 del Ministerio de Seguridad Pública, “se establece la visa para pasajeros o tripulantes en tránsito como requisito para los ciudadanos extranjeros de nacionalidad cubana que viajen por la República de Panamá, hacia otro destino o de retorno a su país, durante un periodo de tres meses”.

Según se informó, quienes tengan boletos hasta la medianoche del 12 de marzo podrán volar sin dificultad, si su tránsito en Panamá no excede las 12 horas, en tanto quienes lo hagan en los 15 días siguientes deberán reprogramar su boleto y obtener la visa.

La resolución panameña añade que la visa de tránsito será otorgada hasta por un periodo máximo de 24 horas y solo autoriza a permanecer en el área de tránsito internacional del aeropuerto para continuar su viaje hacia otro destino o a su país de origen.

El costo de la visa será de unos 50 dólares estadounidenses y debe ser solicitada personalmente ante el consulado panameño del país en que se encuentre, con un plazo mínimo de 15 días hábiles antes de la fecha prevista de viaje.

Para el visado deberá presentarse el formulario de solicitud para pasajeros o tripulantes en tránsito, dos fotos de carné, copia del pasaporte y del documento de identidad del país de residencia, reservación aérea y comprobante de pago de los derechos consulares.

Ponerle más presión a la cazuela

Para no pocos resulta sospechoso que la exigencia de visado de tránsito para cubanos que viajen vía Panamá suceda a medidas relacionadas con viajeros cubanos adoptadas por Colombia y Costa Rica y elucubran que apuntan a una agenda desestabilizadora.

La visa de tránsito para ingresar y permanecer en el Aeropuerto Internacional de Costa Rica, en tránsito hacia otro país como destino final, es requerida para los ciudadanos cubanos (desde el 21 de febrero de 2022), de acuerdo con una circular de la Dirección General de Migración y Extranjería de Costa Rica.

Por su parte, el 15 de febrero, el Consulado General de Colombia en Cuba anunció que no aceptaría hasta nuevo aviso solicitudes de visado de tránsito, ante la falta de capacidad para procesarlas en tiempo.

“No se puede negar lo obvio, la gente está vendiendo sus casas para irse y no pocos jóvenes solo hablan de irse y sacan cuentas de cuánto costaría”, dice Magalys Vega, abuela de dos muchachos.

Aunque no existen datos oficiales, según medios alternativos, desde que en noviembre pasado Nicaragua eliminó el visado para viajeros de nacionalidad cubana crecieron exponencialmente las salidas hacia ese destino, presuntamente con Estados Unidos como destino final.

Datos del Servicio Nacional de Migraciones de Panamá, citados por medios de prensa, indican que, entre enero y septiembre de 2021, unos 12.800 nacionales de la isla caribeña atravesaron la selva del Darién, entre Colombia y Panamá, una ruta terrestre hacia EE.UU.

Al referirse al conflicto, las autoridades cubanas señalaron la creciente politización del tema migratorio por el gobierno estadounidense, cuyas autoridades no han cumplido los acuerdos de 1984 y 1994, que establecen la entrega de no menos de 20.000 visas anuales para ciudadanos cubanos.

Informaciones de la prensa oficial cubana indican que hasta inicios de marzo fueron devueltos a la isla 861 migrantes irregulares desde Estados Unidos, México y Bahamas, lo cual produjo un incremento de 166 personas cubanas en esa situación desde el 24 de febrero pasado.

La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) habría reportado que, en enero pasado, se detuvo a 9.827 inmigrantes cubanos, cerca de 13 veces más que los 732 del mismo mes de 2020. (2022)