La Habana, 12 dic. – Los errores innatos del metabolismo (EIM) son un grupo de enfermedades genéticas que afectan la capacidad del cuerpo para procesar ciertos nutrientes y puede tener un impacto significativo en la vida de quienes las padecen, especialmente en lo que respecta a su alimentación.

Para muchos pacientes, la dieta no es solo una cuestión de salud sino un tratamiento esencial que puede marcar la diferencia entre una vida normal y complicaciones graves.

A propósito, el Instituto de Investigaciones para la Industria Alimenticia (IIIA) presentó el pasado 4 de diciembre, en el III Simposio Innovación para la Sostenibilidad de ese sector, los resultados de un proyecto sobre alimentos de bajo contenido proteico.

Gwendolyne Hernández, investigadora auxiliar del IIIA, explicó durante la cita celebrada en el Hotel Meliá Habana, que la iniciativa permitió evaluar el empleo de materias primas alternativas de producción nacional en el desarrollo de productos alimenticios de bajo valor proteico.

Resultaron del estudio la producción de una golosina tipo gomita, la mermelada mixta de mango/guayaba, una bebida láctea sabor piña, dos bebidas lácteas con frutas, la hamburguesa de vegetales y la premezcla base, destacó.

Se logró también la emisión del boletín temático “Alimentos con bajo contenido de proteína” y se pretende confeccionar un recetario con productos desarrollados entre 2024 y 2025, resaltó.

La iniciativa permitió evaluar el empleo de materias primas alternativas de producción nacional en el desarrollo de productos alimenticios de bajo valor proteico».

Gwendolyne Hernández, investigadora auxiliar del IIIA

Hernández Rodríguez añadió que buscan cubrir parcialmente las necesidades nutricionales de los llamados pacientes con EIM, otorgándoles mayor disponibilidad de alimentos a las familias cubanas.

Ulises Cabrera Cárdenas, pediatra intensivista y nutricionista, ofreció durante el simposio la conferencia “Errores innatos del metabolismo. Estudio de caso. La Fenilcetonuria” donde mencionó los padecimientos más frecuentes en las consultas infantiles de esa índole.

El reconocido pediatra puntualizó en que el tratamiento de estas afecciones está enfocado en controlarlas, prevenir daños y que los niños mantengan una vida lo más normal posible.

¿Qué son los errores innatos del metabolismo?

Estos trastornos genéticos alteran el metabolismo de proteínas esenciales para el procesamiento de nutrientes, y como resultado el cuerpo no puede descomponer o utilizar adecuadamente estas sustancias, lo que lleva a la acumulación de compuestos tóxicos o la deficiencia de nutrientes esenciales.

En el caso de los pacientes con esta condición, la dieta no es simplemente una recomendación nutricional sino una parte fundamental de su tratamiento.

Dependiendo del error metabólico, los pacientes pueden requerir de la restricción de ciertos nutrientes como en el caso de la fenilcetonuria, donde deben limitar el consumo de fenilalanina, aminoácido presente en proteínas de origen animal; y con la suplementación específica, referente a la enfermedad de la orina con olor a jarabe de arce, necesitan suplementos de aminoácidos específicos para compensar las deficiencias metabólicas.

Sobresalen también los alimentos especializados pues muchos pacientes dependen de productos médicos diseñados específicamente para su afección, como fórmulas bajas en proteínas o libres de ciertos azúcares.

Vivir con un EIM no es fácil y menos en la sociedad cubana actual donde de por sí se hace difícil mantener una alimentación normal.

Los pacientes y sus familias enfrentan desafíos diarios, desde la planificación de comidas hasta la necesidad de evitar alimentos comunes que podrían ser perjudiciales; además, el costo de estos y el acceso es una barrera significativa.

Resulta esencial que los profesionales de la salud en Cuba, las instituciones educativas y la sociedad en general comprendan estas condiciones y brinden el apoyo necesario; aún más, en el complejo contexto actual.

Ciencia con resultados

Desde su fundación el 1 de enero de 1977, el IIIA se considera un líder en innovación y desarrollo de la industria alimentaria en la nación antillana, comprometido con la nutrición sostenible y saludable de la población.

Sobresalen entre sus resultados los alimentos para el adulto mayor, embarazadas y personas que no pueden consumir proteínas, así como jugos a partir de frutas y hortalizas para niños, y productos bajos en azúcar.

El IIIA, radicado en el municipio La Lisa, es el principal centro de capacitación en Cuba en materia de Ciencia y Tecnología de los alimentos autorizado por los ministerios de la Industria Alimentaria y Educación Superior para impartir cursos de posgrado. (2025)