Cuba en la protección de la capa de ozono
En el país existen aun reservas para cumplir los compromisos del Protocolo de Montreal

Cuba se excluye de la lista de países que más perjudican al medio ambiente mantiene una política en favor de su protección.
La Habana, 30 mar .- Uno de los resultados sobresalientes de Cuba en su programa por proteger la capa de ozono es la supresión de los colofluorocarbonos(CFCs) en la refrigeración doméstica, los aerosoles farmacéuticos, industriales y los extintores de incendios que contienen halones o productos químicos perjudiciales. Así lo constataron expertos y directivos de empresas cubanas quienes expusieron sus experiencias para perfeccionar la protección de sustancias agotadoras de la capa de ozono, durante un taller nacional desarrollado en la central ciudad de Sancti Spíritus a principios de marzo.
El doctor Nelson Espinosa Pena, director de la Oficina Técnica de Ozono, entidad perteneciente al Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente de la isla (CITMA), subrayó que aunque Cuba se excluye de la lista de países que más perjudican al medio ambiente mantiene una política en favor de su protección.
Afirmó el experto que en el país existen reservas para cumplir los compromisos del Protocolo de Montreal, del cual la nación es signataria desde 1992.
Entre las líneas de trabajo figura el darle continuidad al programa de reconversión de equipos con componentes tan nocivos como los Hidroclorofluorocarbonos (HCFC) empleados en sistemas de frío con el empleo de refrigerantes naturales de producción local.
El encuentro puso énfasis en el máximo control de los procesos de recolección y almacenamiento de componentes perjudiciales a la atmósfera que existen en empresas.
Para la eliminación de esas sustancias existe una planta con tales fines en la Fábrica de Cemento Siguaney, ubicada en la provincia de Sancti Spíritus.
Cuba tiene programado reducir en un 10 por ciento hacia 2015 el consumo de HCFC, sustancias que además de agotar la capa de ozono, son potentes gases de efecto invernadero que influyen notablemente en el cambio climático.
Este país erradicó en poco más de tres lustros la compra y consumo de los clorofluorocarbonos, bromuro de metilo, halones y tetracloruro de carbono, con un aporte significativo a la salud y el cuidado del medio ambiente.
También fortaleció el marco legal que posibilite garantizar el cronograma nacional para suprimir las SAO y asegurar el sistema de licencia de importaciones y exportaciones.
Las autoridades también siguen trabajando intensamente en la formación de personal capacitado para el manejo de tecnologías limpias en esa dirección que incluye a expertos del más alto nivel en los centros universitarios. Asimismo, la isla caribeña cuenta con un centro de investigaciones dedicado al tema.
Entre los proyectos ejecutados en la última década, sobresale la reconversión tecnológica de la planta encargada de producir inhaladores para asmáticos, los cuales son fabricados ahora con propelentes ecológicos libres de CFC. (2013)
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