Cuba ratifica su compromiso de preservar la capa de ozono
En varias provincias avanza el cumplimiento del Plan nacional de eliminación de sustancias agotadoras de la capa de ozono.

Entre 2024 y 2028, la nación caribeña espera implementar la primera etapa del proyecto de reducción de los clorocluorocarbonos y propiciar un cambio tecnológico significativo, amigable con el medio ambiente
Foto: Jorge Luis Baños/IPS Cuba
La Habana, 2 oct.- Un nuevo grupo de instalaciones y unidades de servicios de varias provincias cubanas se suman en 2024 a la lista de entidades libres de sustancias agotadoras de la capa de ozono (SAO), para estimular en el país la preservación del llamado escudo protector de la Tierra.
Las entidades pertenecen en su mayoría al sector del turismo, entre ellas, hoteles, marinas, lavanderías. Otras se relacionan con la recuperación de materias primas, servicios técnicos de computación, comunicaciones y electrónica de la industria del níquel y la telefonía.
Este año, por primera vez se reconoce a una empresa del sector privado, la mipyme Renova S.R.L., en la central provincia de Camagüey, como entidad libre de SAO.
Las declaratorias anuales forman parte de las acciones de Cuba para cumplir los compromisos asumidos con la firma del Convenio de Viena para la protección de la capa de ozono y la adhesión al Protocolo de Montreal, en 1992, y sus posteriores cinco enmiendas.
El camino hasta hoy
El país caribeño se enfoca en la eliminación paulatina de las sustancias que dañan la capa de ozono, a partir de eliminar totalmente los clorocluorocarbonos (HFC) en la refrigeración doméstica y comercial y sustituirlos en la producción de aerosoles farmacéuticos.
Otro avance consiste en suprimir el bromuro de metilo que se emplea en los semilleros de tabaco, viveros de café, así como en los cultivos protegidos de hortalizas, flores, plantas ornamentales y en almacenes de la industria molinera.

Entre las acciones implementadas hasta la fecha, en correspondencia con los compromisos internacionales, se encuentran la erradicación del bromuro de metilo, el tetracloruro de carbono, el metilcloroformo, los halones y otras SAO.
Sobresale entre los avances del plan, la no utilización del gas refrigerante R-141b en la producción de las espumas de poliuretano, empleadas en paneles aislantes para la construcción, equipos de refrigeración y envases de medicamentos, que demandan temperaturas específicas.
De acuerdo con Nelson Espinosa, director de la Unidad Técnica del Ozono, del Centro de Gestión de la Información y Desarrollo de la Energía (Cubaenergía), desde 2021 la isla desarrolla la fase final del programa para eliminar los hidroclorofluorocarbonos (HCFC).
Estos son gases de amplio uso en la refrigeración doméstica e industrial y la climatización, que dañan la capa de ozono y favorecen el aumento de la temperatura media del planeta.
El país introduce alternativas más seguras para sustituir las SAO, como los refrigerantes naturales (hidrocarburo, amoniaco y dióxido de carbono), incluidos en proyectos que no dañan la capa de ozono ni provocan calentamiento atmosférico.
Datos oficiales indican que en la planta de destrucción de SAO, localizada en la fábrica de cemento Siguaney, en la central provincia de Sancti Spíritus, se eliminaron 4100 kilogramos de estas sustancias, aunque existen algunas dificultades para cumplir el protocolo.
Según Armando Gómez, de la Unidad Técnica del Ozono, en Cuba se prioriza la capacitación y la comunicación.
“Tenemos 17 aulas prácticas donde se imparten cursos a importadores, proyectistas y personal de la Aduana sobre la entrada de productos y tecnologías que emplean SAO”.
Entre las acciones de comunicación social para promover el cuidado de la capa de ozono se destacan concursos de alcance nacional y actividades deportivas, recreativas y de divulgación científica dirigidas a la infancia y la adolescencia, así como intervenciones sobre el tema en programas radiales y televisivos.
Trecho por andar
La Unidad Técnica del Ozono y la Oficina Nacional de Estadística e Información se realizan este mes un nuevo levantamiento de refrigerantes y equipos que se usan en el país.
La iniciativa busca mejorar la preparación en la reducción de las SAO y la entrada al país de equipos amigables con el medio ambiente.
Comenta Gómez que, entre los retos para 2025, se encuentran cumplir con la reducción prevista de los consumos de HCFC R-22 y el congelamiento de los HFC comprometidos con el Protocolo de Montreal.
Otros objetivos son impulsar la rehabilitación de la planta de producción de hidrocarburos refrigerantes de Santiago de Cuba, a fin de conseguir la independencia tecnológica al producirlos en el país. (2024)
Su dirección email no será publicada. Los campos marcados * son obligatorios.
Normas para comentar:
- Los comentarios deben estar relacionados con el tema propuesto en el artículo.
- Los comentarios deben basarse en el respeto a los criterios.
- No se admitirán ofensas, frases vulgares ni palabras obscenas.
- Nos reservamos el derecho de no publicar los comentarios que incumplan con las normas de este sitio.