El tabaco, uno de los cultivos de mayor importancia para las exportaciones cubanas por aportar las hojas para los conocidos habanos, sortea obstáculos climáticos y materiales, intentando no comprometer los ingresos que demanda una economía con severas restricciones financieras.

Reducir la superficie dedicada al cultivo en la campaña 2020-2021, resembrar lo perdido como consecuencia de los eventos climatológicos, entre ellos la tormenta tropical Eta, extender las siembras hasta febrero y alargar a unas 16 horas el uso de la maquinaria, son algunas estrategias para revertir los daños ocasionados por las lluvias.

Según medios locales, las circunstancias climatológicas y las limitaciones financieras del país para la adquisición de algunos recursos llevaron a reajustar las cifras de siembra en la occidental provincia de Pinar del Río, que aporta más del 70 por ciento del tabaco en Cuba.

De las 19.748 hectáreas previstas allí para la temporada, iniciada el 10 de octubre pasado y que se extiende comúnmente hasta diciembre, se sembrarían solo 16.170 hectáreas.

Por las lluvias de noviembre, indicaron reportes oficiales, en ese territorio se perdieron más de 57.000 canteros de semilleros, lo que representó el 55 por ciento de lo sembrado desde octubre.

Datos ofrecidos por el ministro de agricultura, Gustavo Rodríguez Rollero, mostraron que en el país resultó impactada un área sembrada de 1.171 hectáreas, de las cuales 584 se perdieron totalmente y otras 222 recibieron diferentes daños.

En el caso de los semilleros, se reportó la pérdida de 189. 621 canteros tradicionales, canteros afectados (88 445); en túneles de tabaco, 21 521 bandejas perdidas y 29 539 bandejas con daños.  La pérdida total de posturas asciende a 329 millones 126.000.

Cosechado fundamentalmente en Pinar del Río, en el occidente, y Sancti Spíritus y Villa Clara en el centro, el tabaco es uno de los cultivos económicos más importantes del país, por su impacto en las exportaciones, que aportan cada año entre 300 y 400 millones de moneda libremente convertible.

En la cuna del tabaco, volver a empezar

En Pinar del Río, indicaron medios locales, se acelera la riega de semilleros y la siembra de la solanácea, al disponerse de más de 245 000 canteros, con diferentes tipos y variedades de tabaco, tanto negro como rubio.

Sin embargo, de acuerdo con datos ofrecidos por Virginio Morales, especialista de agrotecnia de Tabacuba, en tiempos normales en Pinar del Río se habrían sembrado unas 8.000 hectáreas, pero en estas condiciones apenas acumulan 1.100.

Según declaró, con anterioridad han ocurrido corrimientos de la campaña, pero esta es la primera ocasión en que “la situación ha sido tan fuerte y agresiva”, como resultado de los fenómenos meteorológicos consecutivos de octubre y noviembre.

Morales ejemplificó que todavía el 18 de noviembre, en el emporio tabacalero de San Juan y Martínez, cayeron 105 milímetros de precipitaciones.

El especialista destacó que la estrategia prevé agilizar las acciones en los semilleros tradicionales y en los túneles protegidos y en las propias áreas destinadas a la hoja, emplear al máximo la tracción animal y la maquinaria, asi como el óptimo aprovechamiento de las posturas.

Según trascendió tras la tormenta tropical Eta, no se dañaron las 30.000 toneladas de la solanácea acopiadas en la campaña precedente y se mantiene las labores de beneficio en las 115 escogidas y 22 miniescogidas.

El beneficio de la hoja de la anterior campaña, informó Morales, se sobre cumplió al tres por ciento y se prevé concluir esta labor al término del año, a partir de la entrada de los recursos forestales y la atención al corte de cujes.

En concordancia con las prioridades del país, las tierras que no acogerán las plántulas de tabaco, se destinarán a otros cultivos que no afecten los suelos como frijol, maíz, habichuelas, para contribuir así a la sostenibilidad alimentaria y la sustitución de importaciones.

 

No solo en Pinar

Aunque los males mayores se concentran en Pinar del Río, según publicó el grupo empresarial Tabacuba en su página institucional en Internet, como consecuencia de Eta se produjeron igualmente perjuicios severos en las provincias del oriente y del centro del país, donde también se cultiva la hoja, fundamentalmente en las tierras que se encontraban listas para la siembra, los semilleros y las plantaciones.

Sin embargo, el tabaco acopiado de la campaña precedente, protegido y salvado en las diferentes partes del proceso indica que al menos, por ahora, hay materia prima para torcer a mano los famosos puros.

El pasado año, la compañía mixta Habanos S.A., encargada de la comercialización de los torcidos a mano, obtuvo 531 millones de dólares en negocios, con un crecimiento de dos por ciento en relación con el año anterior.

Fuentes de esa empresa mixta, formada en 1994 entre Tabacuba y Altadis, de la británica Imperial Tobacco Group, durante 2019 se superaron las cifras de exportaciones previstas en cinco por ciento y crecieron en más de 11 millones de dólares sobre 2018, a la vez que aumentaron las ventas de torcidos en el mercado interno, los mejores resultados en los últimos 11 años. (2020)