La Habana, 14 jul.- Una iniciativa del Grupo Trans Masculinos de Cuba propone aportar una visión plural de las transidentidades mediante la campaña #AhSoyTrans de forma sostenida en el tiempo para visibilizar de forma constante a ese segmento poblacional del país.

Según la convocatoria, la idea tiene entre sus objetivos demostrar que “los hombres trans/personas trans AFAB (siglas en inglés de la expresión: asignado femenino al nacer) somos #diversas y que al igual que los demás tenemos sueños, cualidades, preocupaciones, valores, virtudes, defectos… y merecemos los mismos derechos y oportunidades”.

Verde Gil, coordinador del grupo, explica que la campaña tiene sus antecedentes en una iniciativa similar que impulsó en 2020, cuando vivía su segundo año de transición como trans masculino.

“Tenía muchos deseos de aprovechar las herramientas que estaba aprendiendo en la carrera de Comunicación Social, para trabajar temas como los estereotipos, los estigmas y la invisibilización, el desconocimiento que hay alrededor de las personas trans tanto masculinas como femeninas”, resalta.

También explica que esa experiencia lo motivó a desarrollar la campaña Uniformes para todes, desde su rol en ese momento como vicecoordinador de la red Transcuba en Villa Clara, provincia central de la isla.

Conexiones

El activista especifica que la actual campaña se focaliza en las personas trans AFAB y forma parte de las acciones del Grupo Trans Masculinos de Cuba, fundado en febrero de 2023.

“Pretendemos que sea estable en el tiempo, que sus participantes sepan que pueden aportar muchísimo a eliminar prejuicios hacia la comunidad trans y que otras personas con esa misma identidad de género logren ganar fuerzas y establecer nexos con otras”.

Asegura Gil que cada persona hace un aporte inestimable al exponer parte de su vida ante el público. “Es un gesto muy valiente y necesario. Además, le permite al grupo estar conectando todo el tiempo con personas nuevas a lo largo del país”.

Según se anuncia en el perfil de Facebook del grupo, se publicarán de forma regular viñetas sobre quienes decidan enviar un breve perfil biográfico.

Las personas deben responder preguntas como las siguientes: ¿Con qué nombre o apodo quieres que te llamen?, ¿qué edad tienes?, ¿de qué región del país eres?, ¿en qué trabajas o estudias?, ¿qué sueños y aspiraciones tienes?, ¿algún miedo o preocupación que enfrentas?

Del mito a la realidad

El post de presentación de la campaña señala que “uno de los mitos más divulgados no solamente en Cuba” plantea que los trans masculinos “somos muy pocos, una minoría dentro de una minoría, lo cual no es realmente cierto. ¡Somos más de lo que piensan y estamos en todas partes!”.

En tal sentido, se hace énfasis en cómo dicha invisibilidad también refuerza sentimientos de soledad, incomprensión y exclusión.

De acuerdo con la Encuesta sobre Indicadores de Prevención de Infección por el VIH/sida, realizada en 2017 y que publicó la Oficina Nacional de Estadística e Información en 2019, existían alrededor de 3700 personas trans en Cuba con edades de 12 a 49 años. Aproximadamente el 90 % eran trans femeninas.

Tanto la campaña #AhSoyTrans, como otras acciones de activismo LGBTIQ+ que impulsan la iniciativa Por una Cuba Inclusiva, el proyecto sociocultural AfroAtenAs y el grupo Translúcidos ayudan a capacitar y empoderar a personas con diversas identidades de género en la isla.

Transición difícil 

Otro post del Grupo Trans Masculinos de Cuba invita a donar recursos utilizados para modificar el cuerpo, que no se venden en el país “ni pueden comprarse de manera online dadas múltiples restricciones comerciales, financieras y tecnológicas”.

De acuerdo con la publicación, acceder a testosterona (inyectable o en gel), jeringuillas desechables, minoxidil, entre otros productos, “se vuelve especialmente engorroso y costoso para las personas en situaciones de vulnerabilidad que sufren con mayor fuerza el impacto de la crisis económica, agravada por un mayor índice de desempleo asociado a la discriminación persistente”.

También se alude al “limitado” acceso a la terapia hormonal y a las cirugías de reafirmación de género, la escasez de insumos para el cuidado de la salud sexual, la desinformación y  la falta de apoyo familiar e institucional “para emprender el camino” de la transición de las personas trans.

Según el grupo, cada aporte “puede significar un alivio incalculable para la persona trans/AFAB beneficiaria: un aumento de su calidad de vida, una puerta a nuevas posibilidades de existir e interactuar socialmente y una mejor relación con su identidad corporal”. (2024)