La Habana, 19 oct.- Nuevas educadoras sociales para marcas cubanas y extranjeras de cosmetología adquirieron conocimientos y herramientas para promover la prevención del cáncer de mama en el Seminario Salud y Bienestar, organizado por el proyecto sociocomunitario Súmate

“Capacitar a voluntarias de diferentes sectores de la sociedad facilita transmitir los mensajes de salud acerca de esta enfermedad y la necesidad de realizarse el autoexamen mensual”, declaró a la Redacción IPS Cuba Danilo Serrano, coordinador de Súmate, que por tercera ocasión organiza una Semana Rosada.

El proyecto coordinó actividades del 14 al 19 de octubre, entre las que destacó el seminario realizado el 17 de octubre para jóvenes que promoverán mensajes educativos junto a las marcas Suchel Camacho, Narciso Rodríguez, L´Oreal y la jabonería artesanal privada D´Brujas

Conocimientos
En una exposición sobre la importancia del autoexamen de mama, la psicóloga Roxana Mir alertó que cada año se detectan en Cuba unos 3.000 nuevos casos de esta enfermedad y no solo en mujeres, sino también en hombres.

“El 70 por ciento de los diagnósticos precoces de cáncer de mama son realizados por las propias mujeres mediante el autoexamen”, destacó, en el seminario realizado en el hotel Gran Manzana Kempinsky, que se suma al apoyo de la promoción de la salud.

Elisa Panadés, en representación de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, disertó acerca de la importancia de velar por los valores nutricionales de los alimentos.

La idea de organizar una Semana Rosada apoya las políticas sanitarias, sobre todo en la atención y la prevención temprana del cáncer de mama, y enfatiza en su relación con otros problemas como la violencia hacia las mujeres y la intrafamiliar, dijo Serrano.

“Este seminario, el primero de muchos que vamos a realizar, se dedica a formar educadoras sociales para las marcas sobre esta enfermedad detectable a tiempo y otros asuntos de responsabilidad social como medio ambiente, incluido el reciclaje”, amplió.

“Algunas acciones las desarrollaremos en centros comerciales, de la mano de las empresas, mientras otras, llegarán a espacios sociales diversos para abordar varios temas”, precisó.

Susel Ferrán, vendedora de la compañía francesa Saint Rémy Trading, un distribuidor en Cuba desde hace 25 años de marcas como Narciso Rodríguez, indicó que “es una iniciativa humanitaria para la salud, el bienestar y la calidad de vida de las mujeres: como empresa estamos comprometidos con la lucha contra el cáncer de mama”.

Sayuri Salazar, educadora de L´Oreal Profesional, de la empresa Comercial Toledo, explicó: “promovemos un producto de belleza y esta es parte de la salud. Queremos ayudar de cierta manera a las personas que padecen esta enfermedad y mediante Súmate tenemos vínculos con el Hospital Oncológico de La Habana”.

Diversas en edades y profesiones resultaron las jóvenes que acudieron a la convocatoria del proyecto para el primer seminario.

Para Amanda de Soto, de 22 años y estudiante de tecnología de la salud, fue “espectacular y más que instructivo”. De 29 años y especialista principal de producción en una empresa de calzado, Deyelena Olivares calificó de lo más importante a las recomendaciones acerca del autoexamen de mama.

Según Wennys y Mariela Díaz, de 20 años y estudiantes de periodismo, sin parentesco entre ellas, hablar de educación y bienestar a las mujeres es una forma de participar y hacer activismo en la lucha contra el cáncer de mama.

Otras actividades
Además del seminario, Súmate desarrolló otras actividades en la semana como un concierto de la agrupación musical DE´Cuba y acciones de promoción de salud junto a las empresas asociadas en la Plaza Carlos III, uno de los centros comerciales más frecuentados de La Habana.

Por su parte, el Instituto de Artivismo Hannah Arendt, con apoyo del sitio web alternativo ADN, también acogió un programa de actividades, desarrollado del 4 al 18 de octubre, para focalizar la atención sobre esta enfermedad y las actitudes proactivas de las mujeres que lo padecen, con conferencias de especialistas, proyección de audiovisuales y conversatorios en su sede, en La Habana Vieja.

“Nos hemos mirado entre nosotras para reconocernos aliadas, para acompañarnos en el camino”, dijo la profesora y sobreviviente de la enfermedad, Omara Ruiz Urquiola, que organizó el programa, aunque la actividad de cierre fue impedida de realizar por parte de las autoridades. (2019)