Reflexión crítica desplaza a postales en velada por Día de la Mujer

En Cuba, esta efeméride internacional se celebra desde 1931.

El encuentro unió diferentes experiencias, proyectos y personas.

Foto: Jorge Luis Baños/ IPS

La Habana, 7 mar.- Pasar del gastado cliché de las flores, las felicitaciones y las postales a la reflexión crítica acerca del medio ambiente, el aniversario 500 de La Habana, conquistas, derechos y retos, animó a un grupo de personas diversas a celebrar de forma innovadora el Día Internacional de la Mujer.

Con sede en la Embajada de España en la capital cubana y conducido por la realizadora audiovisual y directora del proyecto Palomas, Lizette Vila, el espacio realizado el 5 de marzo unió experiencias diferentes, proyectos y personas, con la mirada puesta en la defensa de la justicia y la equidad social, considerando las perspectivas ambiental y de género.

El documental Mujeres… de la basura al bienestar, de Ingrid León y Lizette Vila, estrenado en 2018, se exhibió en el encuentro.

Alternando audiovisuales con explicaciones acerca de instituciones e iniciativas relacionadas con la higienización de barrios habaneros, el encuentro fue organizado de conjunto entre Palomas y la Agencia Española de Cooperación Internacional y Desarrollo (AECID).

“Es un día de celebración, pero también de análisis, de demanda y regocijo”, dijo Vila, tras recordar las luchas de las mujeres por conquistar la igualdad y el derecho el sufragio y la realización en La Habana del congreso de la Federación de Mujeres Cubanas (FMC).

Sin brazos cruzados

El documental Mujeres… de la basura al bienestar, de Ingrid León y Vila, estrenado en 2018, puso sobre el tapete el polémico tema de la situación higiénica de la capital cubana y la deficiente recogida de desechos sólidos.

El audiovisual, que no tira toallas, aborda las experiencias de mujeres que han convertido a la basura en aliada, tanto para la venta de materias primas como en el reciclaje para la confección de objetos decorativos, obras de arte y hasta fuentes secas, hechas con neumáticos reciclados.

En un breve conversatorio a auditorio lleno, Liana Bidart, coordinadora del Programa de gestión ambiental del no gubernamental Centro Félix Varela, explicó las acciones y alianzas que lleva adelante esa institución, fundada en 1993, para la formación de una ciudadanía activa y responsable, que construya una sociedad equitativa.

El 8 de marzo “es un día de celebración, pero también de análisis, de demanda y regocijo”, dijo Lizette Vila, directora del proyecto Palomas.

“Nuestros ámbitos de acción están relacionados con el trabajo en redes (Mapa verde y Cultura de paz), la labor editorial, el acompañamiento de experiencias comunitarias a lo largo del país, la comunicación, con un enfoque de género y de cuidado del entorno, así como en la Tarea Vida (Plan de Estado para el enfrentamiento al cambio climático)”, dijo.

Ailena Alberto, coordinadora del proyecto Residuos sólidos urbanos, desarrollado hasta 2018 en la barriada de Micro X, Alamar, municipio La Habana del Este, relató que esta iniciativa logró sensibilizar e integrar a parte de la comunidad en la clasificación primaria de la basura y 57 por ciento de los más de 3.000 participantes fueron mujeres, consideradas “potenciales sujetos del cambio”.

Entre las lecciones aprendidas, afirmó Alberto, estuvo la necesidad de involucrar a las autoridades locales e incorporar la visión del desarrollo local en el tratamiento de la vulnerabilidad medioambiental, que toca de manera sensible a las mujeres.

Sin distinciones

Dentro del homenaje a las mujeres todas, Vila recordó puntualmente a la periodista y feminista Isabel Moya, que dio un impulso indiscutible a la visibilización de la temática de género, así como a las pocas mujeres directoras de cine, un camino que abrió la cineasta Sara Gómez, autora del documental Guanabacoa, crónica de mi familia.

La profesora Gisela Arandia, activista por los derechos de las personas afrodescendientes, recordó el papel que estas tuvieron en el devenir histórico de La Habana, por ejemplo, en “la construcción de palacios y otras edificaciones y que la convirtieron en una de las ciudades más bellas de América”.

La profesora Gisela Arandia, activista por los derechos de las personas afrodescendientes, recordó el papel desempañado por las mujeres en el devenir histórico de La Habana.

En el caso de las mujeres, dijo, “crearon estructuras sociales que condujeron a formas y estructuras económicas de empoderamiento”, para formar una clase media negra instruida, como mostró el documental de Gómez, algo de lo que apenas se habla.

Arandia invitó a que cada vez que se hable de las maravillas de La Habana, se piense en quiénes participaron en hacerlas posibles y en el “desafío actual de desigualdades e inequidades, que debemos contribuir a superar”.

Por su parte, Ignacio Ruiz, de la Sociedad Solidaria Andaluza de Desarrollo, se refirió al proyecto Akokán, que persigue mejorar el barrio Los Pocitos, en el municipio habanero de Marianao, a partir del trabajo comunitario.

Varias intervenciones desde el auditorio valoraron positivamente la celebración y lanzaron propuestas de integrarse a las diferentes iniciativas existentes para sanear La Habana, buscar la equidad, favorecer la economía de familias vulnerables, así como crear espacios de debate donde pueden proyectarse estos y otros audiovisuales para promover la reflexión y la acción.

Al encuentro asistieron diplomáticos de España y Canadá, asi como representantes de la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación (Cosude), Cáritas, el Fondo de Población de Naciones Unidas (Unfpa) y organizaciones no gubernamentales con oficinas en La Habana, entre otros. (2019)

Un comentario

  1. Reina Fleitas Ruiz

    Quiero felicitar a todas las compañeras de IPS por el Dia Internacional de
    las Mujeres, todavía es larga la batalla por la Equidad de Género, se han
    logrado muchas cosas pero el camino sigue siendo dificil, sobre todo el de
    evitar retrocesos.
    Tambien quiero compartir una de las ideas que sobre el tema más me asombró
    cuando la leí hace algunos años, fue escrita por Charles Fourier, el
    socialista utópico, en 1808, en un período dificil para las mujeres cuando
    la Ilustración masculina que levantaba las ideas de la igualdad no era
    consecuente con sus análisis de la igualdad entre los sexos. escribió:
    «los progresos sociales y cambios de época se operan en proporción al
    progreso de las mujeres hacia la libertad, y la decadencia en el orden
    social se opera en proporción a la decadencia de la libertad de las mujeres»
    . Es increible como un hombre, del cual se habla poco, tenía tanta claridad
    sobre la conexión entre progreso social y el adelanto de las mujeres.

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