La Habana, 21 jul.- La oenegé Humanity & Inclusion (HI) desarrolla acciones en las provincias de Granma, en el oriente, y Pinar del Río, en occidente, que ayudan a más de 200 personas con discapacidad a crear y lanzar sus emprendimientos.

Con 25 años de trabajo en Cuba, HI actualmente coopera con los actores cubanos y las asociaciones, particularmente en la inclusión económica de personas con discapacidad”, explica Amélie Teisserenc, representante de la oenegé en el país.

Esta labor se encamina a proporcionar autonomía y elevar la autoestima de las personas con discapacidad y cuenta con apoyo financiero del gobierno de Quebec, de Canadá, y la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación.

De acuerdo con Teisserenc, son diversos los emprendimientos surgidos a partir de la iniciativa de HI.

“Tenemos personas que se lanzaron como dulceros, cocineros, albañiles y mensajeros,  otras se dedican a zapatería y también a oficios que tienen que ver con la belleza, como peluquería, barbería y manicura”, añade.

Pero el impulso va más allá, pues comprende también el fortalecimiento de capacidades mediante el intercambio de conocimientos.

“El ciclo comprende, primero, un acompañamiento a las personas para que definan qué oficio quieren y se les capacita tanto a nivel técnico para que aprenden mejor el oficio y también sobre cómo gestionar un pequeño emprendimiento. Luego, se les entregan algunos recursos y materiales para iniciar su negocio”, apunta.

Asimismo destaca la continuidad del intercambio con HI durante los primeros meses de incursionar en el sector no estatal para que puedan alcanzar éxitos.

Impulso en el oriente

Con una década de experiencia, el proyecto Inclusión económica y empoderamiento ofrece más oportunidades para las personas con discapacidad y sus familias en Granma y en Cuba, al promover  el desarrollo de competencias para la inclusión laboral.

A la par, contribuye al fortalecimiento de las capacidades de personas decisoras y empleadoras para que sus acciones sean inclusivas y tomen en cuenta el potencial y necesidades de quienes presentan discapacidad.

Teisserenc recuerda particularmente a uno de los emprendedores de Granma, cuya panadería-dulcería “ha cambiado no solo su vida, sino también la de su familia”.

Al respecto, resalta que los panes y dulces de ese negocio venden hoy “en la comunidad y a la salida de escuelas. Necesitó mucho aprendizaje, a base de prueba y error,  para ver qué funcionaba mejor, en medio de dificultades para la obtención de la materia prima para emplear el horno y otros aparatos que recibió”, apunta.

También se refiere a cómo las acciones de HI cambiaron la autopercepción de las personas con discapacidad como miembros de sus familias. “Si antes se sentían un poco deudoras porque no estaban aportando, ahora son ellas las que están aportando a la economía familiar”.

Todo por la inclusión

El proyecto Pinar del Río Inclusivo se enfoca en promover oportunidades sostenibles de inclusión laboral de personas con discapacidad y sus familias, con énfasis en mujeres y jóvenes, mediante el fortalecimiento de sus capacidades y estrategias de desarrollo.

La materialización de esa iniciativa es resultado de alianzas entre HI en Cuba, la Dirección Provincial de Trabajo y Seguridad Social de la occidental provincia y la Asociación Cubana de Limitados Físicos y Motores.

También participan la Universidad de Pinar del Río y las direcciones municipales de Educación, Salud Pública y las asociaciones de personas con discapacidad en los municipios de Pinar del Río y Consolación del Sur.

Para el desarrollo de iniciativas económicas que deben contribuir a una vida autónoma e independiente, las personas beneficiadas reciben kits de emprendimiento y algunos equipos de cómputo y para mezclas de sonido, entre otras herramientas.

Otras personas operan en la cuenca del río Cuyaguateje, donde asegurar que la preparación antidesastres sea inclusiva  se trabaja junto a la Defensa Civil, las asociaciones de personas con discapacidad y la oenegé CARE, como parte del proyecto Cuenca resiliente,

Además, HI desarrolla proyectos de cooperación tras el paso del huracán Ian, en septiembre de 2022, para brindar apoyo a familias, escuelas especiales y la agricultura, con énfasis en la recuperación de organopónicos y patios familiares.

Con respaldo de la Unión Europea, la iniciativa Comunidades Inclusivas y Resilientes en los municipios Pinar del Río, Consolación del Sur y San Juan y Martínez apuesta por lograr mayores capacidades para la agricultura resiliente con participación e inclusión de mujeres y personas con discapacidad.

Hasta el momento, más de 60 patios familiares, 10 organopónicos, varias familias y los huertos escolares de tres escuelas especiales se benefician con herramientas, medios de trabajo y tanques para almacenar agua potable. (2024)